Ésta es una de las 11 comunidades
mayas que se encuentran alrededor del Área de Protección de Flora y Fauna Otoch
Ma’ax Yetel Kooh, Casa del Mono y del puma.
En el 2003, un grupo de
habitantes de Punta Laguna formo la Cooperativa Najil Tucha, para
prestar servicios turísticos. La cooperativa esta formada por habitantes de la
comunidad y prestan servicios a visitantes nacionales y extranjeros con la
finalidad de sensibilizarlos e invitarlos a participar en acciones de
conservación.
La importancia de la biodiversidad del sitio, fue promovido por una variedad de estudios ecológicos y sociales, algunos de ellos incluyen comportamiento y ecología de los monos araña y la regeneración de la vegetación de la selva.
La importancia de la biodiversidad del sitio, fue promovido por una variedad de estudios ecológicos y sociales, algunos de ellos incluyen comportamiento y ecología de los monos araña y la regeneración de la vegetación de la selva.
Si te gusta disfrutar de los sonidos de la noche, la SCNajil Tucha, te ofrece una zona de acampado cercana a la laguna y que esta condicionada para que disfrutes de tu estancia.
A 44 kilómetros de Tulum, del
cruce donde inicia la carretera que lleva hacia Coba, Nuevo Xcan, Valladolid y
Chichen Itza hay una glorieta que sirve como distribuidor y también nos orienta
hacia Chemax. A una distancia de aproximadamente 17 km se encuentra la
comunidad de Punta Laguna, Poblado Maya en medio de la selva, junto a una
Laguna y una biosfera rica en Flora y Fauna.
Escondido en la selva donde
Yucatán llega al estado vecino de Quintana Roo cerca de la costa del Golfo,
está Punta Laguna, un pueblo pequeño Maya donde los gallos y los puercos tienen
el derecho de paso y el humo de las mujeres haciendo tortillas sobre una flama
abierta filtra por los techos de paja de sus casas. Recorridos guiados por
algunas de las sendas de la selva revelan muchas plantas y animales exóticos, y
también ruinas pre-hispánicas parcialmente enterradas.
Junto con cuatro otros pueblos,
Punta Laguna es parte de una reserva de naturaleza de 5000 hectáreas protegido
por el gobierno que se llama Ma'ax Yetel Kooh, Maya para "casa del mono
araña y el jaguar." Además del especie único de mono araña que habita en
el área, la reserva también es hogar de monos aulladores, pumas, coatís, y
varias aves. El pueblo fué establecido en los 1930s por un hombre Maya que se
llama Ignacio Canal, y sus dos hijos y sus familias siguen viviendo allí hoy.
La cruz representa el símbolo de Cristo y también un símbolo de las cuatro direcciones
cardinales, que los Mayas creen es sagrado. Tributos ceremoniales a dioses
Mayas, especialmente Chaac, el dios de la lluvia, son comunes, porque mucha de
la economía local depende de la cosecha del maíz.
También hay un edificio pequeño
para el gobierno local, una tienda que vende bebidas frías y botanas, y una
palapa donde las mujeres orgullosamente exhiben sus artesanías. Bellos huipiles
(vestidos tradicionales Mayas), blusas, bolsas, pañuelos, y pulseras con
bordado intrincado está disponible para comprar para mucho menos que pagaría
en Mérida. Además de un recuerdo auténtico, tiene la satisfacción de
saber que su dinero ayuda a la comunidad y no va a una cadena o empresa
grande.
Los lugareños son amables y
dispuestos a platicar sobre su cultura y vida diaria. Si haces una conexión
buena con alguien, es posible que te invitara adentro de su casa. Pero sería
falta de respeto no comprar algo de la señora de la casa. La mayoría de la
gente te permitirá tomar fotos, pero siempre pide permiso primero.
Un camino más pequeño va de la
palapa a varias sendas y un cenote antes de terminar en la laguna de agua de
sal. Bajando unos pasos hay un muelle que estira siete metros sobre el agua,
pero también hay una vista excelente desde el camino. La pesca está prohibida,
y porque han visto cocodrilos, es riesgoso nadar. Para entrar a las sendas hay
una tarifa de 30 pesos, y es necesario ser acompañado por un guía local, quien
cobra 150 pesos para un grupo de hasta diez personas. El tamaño de los grupos
es limitado para no asustar a los animales y minimizar la molestia a su
hábitat. Los guías tienen mucho conocimiento del área y un equipo de
científicos les dió entrenamiento sobre la fauna. Igual como la gente del
pueblo, los guías hablan español y Maya, y hay algunos que hablan un poco de
inglés.
Entrando a la selva, caminas en
una plataforma pre-hispánica que se ha desintegrado por las raíces de árboles y
también frecuentemente está escondido por la vegetación. A pesar de la
vegetación profunda, hay muchos lugares donde se puede ver templos y partes de
pirámides. La mayoría de las ruinas son de la época clásica a pos-clásica, de
700 a 1000 dC, y son alternativas fascinantes a sitios populares como Chichén
Itzá y Uxmal porque están en la misma condición como fueron descubiertos, y no
han estado restaurados por los arqueólogos.
El mono araña existe en América
Central y la parte norte de Sudamérica. El nombre viene de su habilidad a usar
su cola prensil para colgar de los árboles mientras sus brazos y piernas son
libres. Esta especie, Ateles Geoffroyi yucatanenses, es más
activo durante la mañana cuando amanece el sol y también a las 5 o 6 pm.
Cuando estés observando los monos
arañas, o cualquier animal aquí, recuerde que son salvajes. No tienen horario y
pueden aparecer o no durante el tiempo que estás visitando. Pero si tienes paciencia,
mantienes tu voz baja y escuchas a tu guía, hay buena oportunidad para ver
algo. Puedes tomar fotos, pero hay que estar listo porque los animales se
mueven rápidamente.
muy bonito el lugar es una verdadera maravilla, yo he hido
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